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Ayer, miércoles 23 de julio, fui al Seminario Comunica 2.0, organizado por Creátika, en la Universidad Diego Portales. Me estacioné en la esquina, en la calle Vergara, casi esquina con Sazié. Llegué poco antes de las 7 y salí poco antes de las 10 de la noche. Cuando salí, caminé con las llaves en la mano hacia el auto, y nada. El auto no estaba. Era justo afuera de un restaurant chino, pregunté si habían visto alguna grúa, por si estaba mal estacionado o algo, pero no, no habían visto nada.
Me fui a la Comisaría de la calle Toesca con República, y estampé la denuncia. Dí todos mis datos, los datos del auto, los detalles. Es fácil ubicar el auto, porque es bien especial, es un deportivo blanco, muy bajo, con llantas grandes, dos puertas, sunroof, escape Nismo, alerón, tiene un autoadhesivo Mac en el vidrio trasero, etc.
No sé si va a aparecer, pero por si acaso tengan ojo.
El carabinero me decía, mire señor, su auto ya está encargado a todas las unidades. Si usted o alguien lo encuentra, no lo toque, no lo abra y menos lo maneje. Usted no sabe en qué ha sido usado o qué sorpresa hay en la maleta. Y si lo llega a manejar y lo encuentra una patrulla no lo va a pasar bien, lo van a detener y no a escuchar y puede que pase un mal rato. Si lo encuentra, llame al 133. Y nada más. Entendió?
Clarito me quedó.
Lo que impacta y emociona es ver cómo se mueven las redes, llamé a María Pastora por dos razones, una porque es una buena amiga, y dos, porque es de las más conectadas que conozco, mi segunda opción era Ignacio, mi amigo Micronauta, el que antes de llamarlo ya me estaba enviando mensajes al celular contándome lo que estaba haciendo. Se movió Twitter, (y por favor, vean el link en Twitter), también los blogs, Elizabeth creó un grupo en Facebook, donde ya hay mucha gente que entrega sus saludos, consuelos y sugerencias, las fotos están en Flickr, se creó una necesidad en Needish, andan varios mensajes de mail circulando por ahí, etc. Da gusto ver, y sobre todo sentir, que las redes sí funcionan, especialmente con la solidaridad generosa.
Así que si alguien tiene buenas ideas respecto a esto, serán bienvenidas. Supongo que la gente de las autopistas tendrá registros del auto pasando por algún control de tags, y supongo que alguien conoce a alguien que conoce as alguien que está ahí en Costanera Norte o alguna de las otras autopistas. O tal vez todo es más simple, y a un par de locos les gustó el auto para carretear un rato y dejarlo abandonado por ahí después. No sé.
Vamos a ver qué pasa, cualquier cosa, gritaré.
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