En el principio era el verbo... o no?

Libros y Blogs sin movimientos, sin acciones...
Leo en la prensa, y en el Maestro Chasquilla, acerca de este Michel Thaler, que ha publicado en Francia "Le train de nulle part", que, aunque cueste creerlo, no contiene un solo verbo. Son 233 páginas sin referencias a acciones y donde se ha llenado el espacio con interminables descripciones de los pasajeros de un tren. Una vez, Georges Perec, otro francés, logró evitar por completo el uso de la letra e en su novela "La disparition" (en la edición traducida al castellano el título es "El secuestro" y la letra ausente es la a). Uf, qué difícil. ¿Cómo ignorar una letra? ¿Cómo sería un blog sin verbos? Sólo descripciones, sin acciones, sólo sustantivos y adjetivos luchando por un espacio... ¿Cómo guardarse palabras como vivir, ser, estar, conocer, leer, escribir, mirar, querer, besar, tocar...?
No way. Me gustan los verbos, sobre todo estos últimos.

UN AÑO ATRAS...
...Y conste que yo encajo en eso de ser el Señor Mímame, Mírame, Escúchame, pero por ser yo mismo esta especie de embutido de pegote y carente, también soy el Señor Sé Que Te Gusta Así, y Quiero Escucharlo Todo. Es tan difícil convivir, pero tan entretenido. Entre los de Marte y las de Venus aparecen hasta de Júpiter, con una que otra tranca y obsesión pero dispuestos a aprender, a ser domesticados hasta lo aceptable y se mueren de ganas por estar y por quererte.
© El mundo sigue ahí. 19/05/03