Gadgets

Juguetes de niño grande
De entrada les voy a decir que asumo que lo único que nos diferencia a los hombres de los niños es el precio que pagamos por los juguetes.

Siempre hemos cargado cosas "útiles". Desde mi extra-tatara-abuelito prehistórico, que andaba con artilugios para hacer su vida más agradable, y en algunos casos, conservarla, nos han gustado las "cosas", los juguetes, los gadgets.

Será que mi "niño interior" está muy en la superficie, pero a mí me encantan estas maravillas, cosas de mínimo tamaño que tocan MP3, que sacan fotos, que se comunican sin cables, que tienen más memoria de toda la que voy a ocupar en varias vidas, que son caras, que son fashion, que son un poco geek, que son símbolos, que el psicoanálisis, OK, lo que quieran. Pero las mujeres están lejos de eso.

Yo soy de los que leo manuales, que aprovecho todo lo que un DVD puede hacer, que programo grabaciones, que comprimo álbumes completos al quemar un CD, que el celular me despierta, junto con la tele y se prende la estufa y el mismo CD, lleno de música a mi gusto, me sirve para seguir escuchando en el auto. Y el GPS te va a decir por donde llegar más rápido a cualquier parte, aunque te conozcas Santiago de memoria porque gracias a un satélite vas a saber donde comprar el mejor regalo cerca de donde vas en ese momento. Y me encanta que una camarita de este porte haga fotos de 5 megapixeles, que los suba vía infrarroja a una Palm, donde también puedes leer tu Blog favorito, o que el iPod de Apple tenga 40 gigas de música. Es demasiado lindo.

Nada es más fácil que regalar a un hombre: JUGUETES.
Eso. Nada más. Olviden las bufandas, los pañuelos, los calcetines. Puaj. No piensen. Juguetes. Sólo eso. Para entretenerse y mostrar a los amigos mientras ellas nos pelan por detrás, moviendo la cabeza diciendo que jamás creceremos.

Creo que la mujer ideal debe ser aquella que es capaz de admirarse por los gadgets de igual a igual a los hombres-niños, y pavonearse con el último grito tecnológico que saca de su cartera y que las conecta con su banco, su casa, y te muestra las fotos de las vacaciones y sabe usar todos los botoncitos y todas las funciones de todo lo que tiene. Todo muy high tech.

Yo me regalé esta Treo 270:
Palm + Celular + Internet.
Ya casi estoy de cumpleaños y me he divertido como un chico todo el día.
Se entiende a las mil maravillas con el buen Mac G4 Titanium.
Estoy feliz hace mucho rato.
Y de la manera más fácil: jugando.