Campaña de Prevención del Sida

"Mi vida la cuido, toda la vida". Ese es el slogan de la nueva campaña nacional de prevención del Sida. Pueden ver uno de los comerciales de la tele, escuchar las frases de radio y ver los afiches aquí.

Desde el primer caso en Chile, en 1980, hasta hoy, han muerto casi cinco mil chilenos y chilenas. Y casi todos jóvenes. Por eso la campaña va dirigida a ellos. Y se dice claramente "condón", sin mayores vueltas ni eufemismos. Los comerciales terminan con la frase "Siempre condón", al igual que en los afiches donde la misma frase está muy destacada. Porque es tan simple como eso. Un condón es la mejor manera de prevenir un contagio. No estoy hablando de lo que hay que pensar antes, ni en tus creencias ni valores, ni en tu personal forma de enfrentar la moral o las ganas, no hablo de tus credos ni convicciones, ni siquiera en otras formas que también resultan, como la abstinencia o pareja única. Llegado el momento, sea por los motivos que fuere, el mejor método para cuidarse y cuidar a tu pareja, y posiblemente salvar tu vida, es el condón. Aparte de prevenir otras perlas de transmisión sexual o embarazos no deseados, este es un tema de salud pública. Se trata de salvar tu vida.



Hace un tiempo escribí aquí mismo un artículo llamado "Un condón en la cartera", donde contaba de este miedo, bastante general, de hacerse el examen de VIH. También les decía a mis amigas que deberían llevar siempre un par de condones en el bolso. (No estoy hablando de sexo con su pareja habitual, amante fiel y todo eso. Me refiero al just in case y para los no emparejados oficialmente).

Alguien me decía que ellas no llevan condones por temor a cierta estigmatización de promiscuidad o simplemente pudor, "¿qué va a pensar de mí?"

Yo no creo. No en el siglo veintiuno.
¿O sí?