El Atrapa Sueños

Y aquí está mi primerísima vez con mi negra nueva, salimos juntos de noche, y desde el piso 14 al lado del Drugstore tomé estas dos fotos. Una hacia la Costanera y la otra hacia el Sheraton, -aunque debería haber sido el Ritz Carlton, pero en fin-. Sin trípode y sin cachar nada todavía de cómo funciona todo. Tenemos que pololear más. Pero para ser la primera vez no estuvo tan mal.

Primeras noches de Otoño, todavía puedes salir en camisa, dormirte sobre la cama, despertar con el sol. Hasta sigue haciendo un poco de calor todavía.

Una vez Pablo Neruda escribió un texto precioso. Si lo quieren leer completo, pídanlo a San Google, se llama Pido Silencio. Yo sólo quiero destacar algo que él pide. Son sólo cinco cosas:
"Una es el amor sin fin. Lo segundo es ver el otoño. No puedo ser sin que las hojas vuelen y vuelvan a la tierra. Lo tercero es el grave invierno. La lluvia que amé. La caricia del fuego en el frío silvestre. En cuarto lugar el verano redondo como una sandía. La quinta cosa son tus ojos. Matilde mía, bienamada. No quiero dormir sin tus ojos. No quiero ser sin que me mires. Yo cambio la primavera porque tú me sigas mirando."

Uf. Y me quedo sin palabras.

Qué pudo contestar Matilde a algo así. Qué contestaría cualquiera de nosotros si alguien nos dijera algo así.

Pido ver el otoño y tus ojos. No quiero dormir sin tus ojos.


(Escucha esto... Y sueña)
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Como no siempre se tiene lo que se quiere, esto es lo que yo veo cuando abro los ojos y miro al techo. Ahí está el Dreamcatcher, regalado, y con amor, como tiene que ser. El atrapa sueños que deja los malos afuera y me deja pasar sólo los sueños buenos. Todos deberían tener uno.

Es bueno soñar.

Soñar que están tus ojos.